Somos ese deseo prohibido...
Bien sabemos que si se enteran nos matan.
Pero nos atraemos mutuamente,
Tus ojos me devoran y tu sonrisa estremece mi piel mientras tus manos recorren mi cuerpo.
Parecemos dos inocentes, cuando en realidad somos dos demonios deseosos de besarse a escondidas.
Somos placer y gemidos,
Somos ese sexo adictivo...
Somos esa poesía que al leerla nuestros corazones se encienden.
Somos el cielo y el infierno.
Fanática de tus labios que succionan mi cuello hasta dejar marcas,
Tengo sueños exóticos con tu lengua juguetona.
Nos comemos día y noche,
Nos amamos día y noche.
Somos esas almas que encontraron su juego preferido.
Esas almas que no quieren soltarse,
Ese abrazo cálido
Y ese amor eterno que nadie entenderá.
Pero esto no es más que un recuerdo,
Nada más que algo sin título,
Algo que se esfumo en el aire...
Es eso que se extraña,
Aquello que creí duradero, no fue más que algo efímero.
Somos eso que quizás en otra vida fue verdadero,
Somos aquello que el destino quiso que no fuera nada más que algo imposible,
Somos dos personas que se amarán con locura pero que jamás podrán estar juntas.
Aquello que en otra vida fuimos todo.
Y que en esta vida no somos más que pedazos de cristal rotos.
Comentarios
Publicar un comentario